Según la AEMA (Agencia Europea del Medio Ambiente), va a parar sobre todo a Asia y África, donde su uso final es prácticamente desconocido

Según un informe publicado hace un par de semanas por la Agencia Europea de Medio Ambiente (AEMA), Europa exportó en 2019 casi 1,7 millones de toneladas de tejido usado a otros países, principalmente asiáticos y africanos. Su destino y uso final (reciclaje, reutilización, vertederos), sin embargo, es muy incierto.

El informe, que utiliza los datos de UN Comtrade entre 2000 y 2019, constata un cambio creciente hacia la consolidación y la especialización en ambos lados de este comercio. Solo cinco países generan habitualmente el 75% de las exportaciones de residuos textiles de la UE. Los 10 principales países receptores, por su parte, importaron el 64% de los volúmenes totales.

Sin embargo, los datos sobre la clasificación, reutilización, reciclaje o eliminación de esos textiles siguen siendo opacos y en gran medida anecdóticos. Por lo general, se entiende que la ropa y los textiles exportados a África se reutilizan y se venden en el país. Asia, en cambio, que recibe el 41% de esas exportaciones europeas, es conocida por sus instalaciones especializadas de clasificación y reciclaje. A menudo recicla los tejidos desechados como trapos industriales o los reexporta al resto del mundo. En ambas regiones, los textiles considerados no aptos para la reutilización acaban en un vertedero.

Las prendas y los tejidos viejos también se han vuelto más valiosos. El kilo de textiles usados europeos se comercializó en 2019 por 0,76 euros frente a los 0,57 del año 2000. Según el informe, el aumento de los volúmenes de exportación en medio de la caída de los precios podría indicar una demanda estable, o un mercado saturado y una menor calidad de los propios textiles. La exigencia comunitaria de que todos los países de la UE dispongan de recogida selectiva de residuos textiles para 2025 podría aumentar aún más los volúmenes.

Agencia Europea del Medio Ambiente, AEMA, comercio desechos textiles
Un vertedero de textiles y prendas usadas en India

Esta inseguridad puede perjudicar las donaciones de los consumidores

Este informe ha aparecido poco después de la publicación de la normativa europea sobre textiles sostenibles y circulares publicada en marzo de 2022. En ella las autoridades comunitarias señalaban las limitaciones de las actuales clasificaciones de los textiles.

El informe también destaca que, con los textiles usados enfrentándose a un destino tan incierto, los consumidores podrían poner en duda el supuesto impacto positivo -medioambiental y social- de las donaciones y del reciclaje de prendas.

Los impactos medioambientales evitados –afirma el informe- dependen de si esta reutilización sustituye realmente a la producción de nuevos tejidos o fibras. En otras palabras, si los textiles usados exportados desde la UE son de una calidad demasiado baja para ser reutilizados, no se reutilizan durante mucho tiempo o no sustituyen a nuevas compras de ropa, puede que no sustituyan realmente a la nueva producción ni beneficien al medio ambiente.

Cada año, millones de toneladas de ropa vieja se envían a todo el mundo como parte del comercio mundial de ropa de segunda mano. The Or Foundation y Vestiaire Collective están presionando para que se regule en beneficio de los países donde van a parar.

+ Info: https://www.eea.europa.eu/publications/eu-exports-of-used-textiles

Pinker Moda

09.03.2023