Custo Barcelona adquiere madurez y gana solidez. En las últimas temporadas sus colecciones han ido evolucionando hacia una mayor sofisticación y, a medida que han ido desprendiéndose de la frescura latina, han ido ganando consistencia. Guarda la identidad a través del patchwork, con el que construye formas y trabaja texturas. A éstas somete también sus estampados, sello indiscutible de la casa, que hoy queda relegado a un segundo plano.En definitiva, en el Briant Park de Nueva York, se presentó un Custo más chic. En mujer, trazó una línea centrada en las formas, de tonos oscuros y apuntes asiáticos, con collages florales, paisajes japoneses, dragones chinos, ilustraciones kabuki o arte Taif del Caribe. En hombre, reinterpreta la alta sastrería, tigres de bengala, apuntes moteros y acabados plastificados. Aprovechó el desfile para lanzar su primera colección de gafas de sol, que pondrá a la venta en septiembre.