Rudolf lanza la línea Bio-Logic, con Ruco-Dry Bio NPE y Bio CGR
Rudolf crea tejidos repelentes a base de componentes naturales: desechos de cereales y mezclas de extractos vegetales
20.01.2021.- Rudolf Group, el conocido proveedor alemán de química textil, lanzó la semana pasada dos nuevas tecnologías permanentemente repelentes del agua. Se trata de Ruco-Cry Bio CGR y Bio NPE, que forman su línea Bio-Logic, creados a partir de materiales estrictamente naturales.
Estas nuevas tecnologías parten de la experiencia acumulada con la anterior línea Ruco-Dry, sin flúor, una tecnología DWR (Durable Water Repellent) lanzada en 2003. Como señala Alberto De Conti, director de la división textil de Rudolf, fue una propuesta profética que iba en la dirección que el sector empezaba tímidamente a seguir. Se inspiraba ya en el biomimetismo y en el estudio de las hojas de loto y de las plumas de las aves.
Aunque Rudolf ya fue entonces -asegura De Conti- un abanderado de este nuevo camino y abrió una puerta a un futuro más seguro y sano, el mercado todavía no estaba preparado para este tipo de soluciones. Era todavía esclavo de la tecnología de los carbonatos de flúor, a pesar de los peligros que suponían. Nosotros siempre intentamos estar un paso por delante de los demás. Ahora estamos cruzando una nueva frontera, enfocando la I+D desde una perspectiva nueva. Cuando solo algunas empresas están experimentando con la biomimética, Rudolf ya no intenta imitar la Naturaleza, sino que utiliza los materiales que nos proporciona.
Lo extraordinario es conseguir este resultado con materiales naturales
Ruco-Dry solo comenzó a ser popular diez años después, cuando el sector reconoció que era el enfoque correcto. Ahora Rudolf lanza también una novedad que el mercado está solo comenzando a valorar porque reconoce la utilidad de los componentes naturales y de la circularidad que aportan.
La funcionalidad de las dos nuevas tecnologías no es extraordinaria -sigue diciendo De Conti-. De hecho, no son más que productos químicos auxiliares que crean en el tejido una resistencia permanente al agua. Lo que es extraordinario es que hayamos conseguido esto con materiales que existen en la Naturaleza. Básicamente, nuestro equipo -que ha necesitado dos años para desarrollar estos nuevos productos- contempla con seriedad la Naturaleza, intentando comprenderla mejor y aprender de sus respuestas.
Bio-Logic, en versión CGR o NPE
Las dos nuevas soluciones -Ruco-Dry bio CGR y Bio NPE- serán comercializadas con la marca Bio-Logic, que también acogerá otros productos todavía en estudio. Creo que estamos en el comienzo de un camino que será extraordinario. Ambas ofrecen a las marcas un camino para mejorar su sostenibilidad, aunque sus resultados pueden resultar ligeramente distintos si se aplican a fibras celulósicas, sintéticas o sus mezclas.
Ruco-Dry Bio CGR es el primer agente basado en desechos de origen vegetal, concretamente del procesamiento de cereales para el sector alimentario. Es una materia que normalmente es eliminada porque no sirve para nada. Aunque su contenido en biomasa supera el 90%, su tecnología ofrece el mismo nivel de funcionalidad y durabilidad de los acabados textiles convencionales para repeler el agua.
Ruco-Dry Bio NPE, por su parte, usa una mezcla equilibrada de extractos de plantas para conseguir la repelencia del agua y de las manchas, compatible con el mantenimiento de la transpirabilidad y toque de los tejidos. A diferencia los otros materiales, los usados en esta tecnología no han sido modificados química o genéticamente. Además, no sirven como alimentación humana o animal o para fabricar combustibles. Todos los extractos, por otro lado, están sometidos a estrictas normas de conservación y sostenibilidad.
La propia empresa comenta que CGR será probablemente más popular en la medida en que las empresas busquen soluciones cradle2cradle. Además, tendrá más disponibilidad que el NPE porque el suministro de materia prima para esta resulta menos abundante que para el CGR.
De momento, la reacción del sector ha sido positiva, entre otras razones porque su coste es similar al de las soluciones que ya usaban las empresas.