Miren Arzalluz es la directora del Museo de la Moda de París y ha recibido el premio Felicidad Duce de la escuela de diseño LCI Barcelona. En la ceremonia de entrega habló de la formación en moda y repasó su trayectoria.
La historiadora española Miren Arzalluz ha recibido el premio Felicidad Duce que entrega la escuela de diseño LCI Barcelona. En este caso, el centro ha galardonado a la directora del Museo de la Moda de París por su aportación al sector al frente de una institución de referencia, así como su importancia a nivel internacional. El jurado valoró la trayectoria de Arzalluz como «coherente, rigurosa y brillante«.
Al recibir el premio, Arzalluz quiso destacar el papel de las escuelas de diseño: «Los estudios de moda son una disciplina todavía emergente. Se ha recurrido mucho camino en poco tiempo, pero hay que seguir inspirando para abrir camino y reflexionar«. Además, reconoció a la figura de Felicidad Duce como «un ejemplo de mujer extraordinaria, creativa y emprendedora«.
Charo Mora, miembro del jurado y experta en moda, habló de la elección de Arzalluz como «unánime por su rigor, profesionalidad e inspiración, que la convierten en toda una referente«.
Quién es Miren Arzalluz
La historiadora, especializada en moda, es directora desde 2017 del Palais Galiera, sede del Museo de la Moda de París. Fue también responsable de colección y exposiciones en la Fundación Cristóbal Balenciaga durante siete años, además de profesora asociada del Groupe EAC, comisaria e investigadora independiente, directora del Instituto Vasco Etxepare y autora de libros, tesis e investigaciones sobre emblemáticas figuras como Balenciaga o Chanel.
«Mi relación con la moda no fue natural, no es algo que he vivido desde la infancia«, explicó Arzalluz. «Mi entorno era rico en humanidades, arte, política… pero la moda era algo que se vivía de manera transversal, nunca estuvo en el centro de mi vida«. La galardonada se definió a sí misma como «una historiadora apasionada» que llegó al «descubrimiento de la moda desde una perspectiva intelectual«.
Referencias cercanas
Los orígenes vascos de Arzalluz impulsaron en parte esta dedicación: «El fenómeno de la moda en la costa del País Vasco es algo turístico, un clima de lujo con sus dos grandes focos en Biarritz y San Sebastián«. Además, en su última tesis la historiadora aborda parte de la biografía de Cristóbal Balenciaga, intentando «comprender lo que era incomprensible: que alguien como el modisto vasco apareciera en su mediana edad en París y se hiciera un hueco en la meca internacional de la moda«.
Sin embargo, lo más relevante para Arzalluz fue «redescubrir la historia de tantas mujeres emprendedoras, creadoras, que encontraron en la moda esa potente herramienta de emancipación, independencia y libertad. Por ejemplo, en la historia de Balenciaga hay muchísimas mujeres que desconocemos y tuvieron un gran papel en su desarrollo: sus socias las hermanas Lizaso, las hermanas Mújica…«, comentó la galardonada.
Arzalluz terminó así su discurso: «Me gustaría dedicar este premio a todas esas mujeres que han hecho la moda, protagonistas pero todavía desconocidas«. Finalmente, reconoció su labor de «seguir contando muchas historias de moda, con los museos como encargados de difundir conocimiento, interpretar y promover la reflexión de nuevo pensamiento«.
Otros nombres destacados galardonados con el premio Felicidad Duce son Pablo Coppola (Balenciaga), Teresa Helbig o Jean Paul Gaultier. El evento de entrega del premio se celebró en la sede de LCI Barcelona, en la calle Balmes 209. La escuela de diseño se trasladará en verano al distrito 22@, junto a la Torre Glòries, en un nuevo campus para convertirla en referente en Europa y en todo el mundo.
Para más información: https://www.lcibarcelona.com/
12.02.2024
