La empresa portuguesa Altri reivindica que el 70% de la superficie de su planta de lyocell en Galicia serán zonas verdes, y ya cuenta con el visto bueno de la Xunta para establecerse en Palas de Rei.

Altri está decidida a montar su planta de lyocell de su filial Greenfiber, nombrada proyecto Gama, en la localidad lucense de Palas de Rei, en Galicia, y a hacerlo con la aprobación de sus gentes. Para ello, explica ahora que más de dos tercios de su superficie serán zonas verdes, respetando el entorno natural de la Serra do Careón.

El proyecto de Altri plantea que el 70% del terreno sean áreas verdes y entono natural.

El total del área ocupada por Altri será de 366 hectáreas, de las cuales la fábrica ocupará 112 ha, el 30% de la parcela. 155 ha se mantendrán en su estado actual, el 42% del terreno. Además, desarrollará un proyecto paisajístico de 99 hectáreas, el 28% de la superficie, que funcionará como cinturón verde, incluyendo áreas de compensación.

Los objetivos ambientales del grupo luso en sus instalaciones son la creación de este cinturón que ayude a preservar las especies naturales autóctonas, y favorecer el crecimiento de especies endémicas protegidas, además de crear una zona tampón para la Zona de Especial Conservación (ZEC) de la Serra do Careón.

Este cinturón verde tendrá una anchura media de entre 20 y 30 metros. El anillo perimetral permitirá «su funcionalidad como zona refugio y corredor ecológico«. Para ello, el proyecto apuesta por especies autóctonas tanto de arbolado como de matorral. Además, contempla la zonificación de la superficie verde que rodeará el área industrial.

Afectación paisajística y ambiental

Altri difunde este plan paisajístico después de recibir múltiples acusaciones, por parte de asociaciones ecologistas y vecinales, de que sus nuevas instalaciones afectarían a la zona natural, así como a su fauna y flora. Además, su planta en Palas de Rei afectaría también al impacto visual, especialmente en relación con el Camino de Santiago, alegando así afectaciones patrimoniales.

Desde la empresa, aseguran que este diseño se ha planteado para «servir de zona de amortiguación con el medio natural circundante, integrar paisajísticamente las edificaciones de la industria, preservar los valores culturales de la zona, como el Camino de Santiago, así como la flora protegida, los hábitats de interés y los espacios naturales de interés local«.

A mediados de marzo, el plan de Altri en Galicia recibió la Declaración de Impacto Ambiental de la Xunta, dando luz verde al proyecto Gama. Aun así, el grupo todavía no cuenta con suficiente financiación para seguir adelante, y espera recibir fondos públicos europeos.

Para más información: https://altri.pt/en

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