Marco della Croce, vicepresidente de la asociación textil de Biella, abrió la jornada explicando los objetivos y prioridades de la Fundación textil de Biella: origen, calidad, creatividad, ética y educación son los valores que nos inspiran y que permiten que las empresas textiles de Biella garanticen al cliente y al consumidor final la transparencia concerniente a la excelencia del producto.Enrico Cietta, socio de Diomedea, explicó los factores que conducen a la elección del consumidor final: la innovación creativa y tecnológica de distritos como el de Biella no es el resultado de una idea aislada, sino que representa un proceso complejo de interacción entre todas las epresas y entre ellas y el mercado.Los ponentes respondieron a continuación las preguntas de los asistentes, con moderación del periodista Atsuko Fujoka. Respecto a la estrategia de las empresas en estos tiempos difíciles, Franco Ferraris, director general de Lanificio Ermenegildo Zegna, comentó ques la clave reside en el valor real de los productos y en su encaje con las percepciones de los compradores.Luciano Donatelli, presidente de la Unión Industrial de Biella, por último, habló sobre el Made in Italy, un activo que debe ser protegido por un sistema de etiquetaje adecuado.La jornada terminó con la entrega del premio Biella the Art of Excellence de este año a la empresa nipona Isetan.