Con este método del IBV se recortan gastos en prototipos y en la fase de desarrollo del producto. La clave está en la plantilla ingeniada por el IBV y los programas simuladores que permiten ver y analizar las deformaciones y tensiones que sufren los distintos componentes del calzado para, de este modo, mejorar su diseño. El procedimiento utilizado hasta ahora en el sector, con maquetas y prototipos reales, presenta dos inconvenientes fundamentales: por una parte, el tiempo y el coste, y por otra, trabajar sólo mediante un procedimiento de ensayo y error, usando y desechando prototipos físicos. Simulación por ordenadorEl uso de herramientas de simulación puede solventar estos problemas. Estos programas informáticos pueden simular las condiciones de exigencia del zapato y reducir el número de pasos hasta la obtención del prototipo. Además, se abre una vía al diseño de calzado y de componentes específicos para colectivos determinados o de forma personalizada. Estas plantillas Biofoot/IBV están conectadas a un ordenador a través de distintos sensores y ofrecen datos sobre la presión en los distintos puntos de la planta del pie durante la ejecución de diferentes gestos: andar, correr, saltar, etc. Mediante un programa informático se simula el comportamiento del material en las zonas de soporte del pie, las tensiones y deformaciones y las exigencias biomecánicas del zapato. Este información se empleaba hasta ahora en ámbitos clínicos y ortopédicos, así como para determinar la validez de distintos modelos de zapatos y componentes. Ahora ha dado el salto al calzado comercial. Además de recortar costes en prototipos y desarrollo de nuevo producto esta inversión tecnológica otorga valor añadido al nuevo diseño.
Cómo diseñar calzado sin prototipos ni maquetas
21/08/2000
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