¿Servirá el Earth Day de 2023 para dar un nuevo impulso a la preocupación ambiental del sector de la moda?

Con motivo del Earth Day (Día de la Tierra) el sector de la moda se ha enfrentado una vez más al papel que desempeña en el cambio climático. EarthDay.org afirma que ha llegado el momento de que las marcas introduzcan cambios cuantificables. Para demostrar su seriedad, la organización pide que se promulguen leyes que responsabilicen al sector de la moda de la reducción de las emisiones de carbono, de las suyas propias y de las de su cadena de aprovisionamiento. También explica que una decisión importante sería utilizar otras materias primas en lugar de los tejidos sintéticos.

Sin embargo, lo que se conoce como emisiones heredadas llevan acumulándose en la atmósfera desde hace más de 200 años. Los expertos afirman que no basta con reducir ahora las emisiones para evitar un mayor cambio climático. Hay que restaurar el clima. Aquí entra en juego la captura de carbono y el papel de algunas fibras naturales como el algodón.

Las emisiones de dióxido de carbono (CO2) representan el 75% del total de las emisiones mundiales, según la Agencia de Protección del Medio Ambiente (EPA) de Estados Unidos. Además, afirma que uno de los mejores instrumentos para eliminar el dióxido de carbono son los árboles, ya que la fotosíntesis lo extrae del aire y lo encierra en los troncos, ramas, hojas y raíces a medida que el árbol crece. El algodón desempeña también un papel clave en la ecuación del carbono. Su planta lo secuestra de forma natural y eficaz en el suelo y en la propia fibra.

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No todos los países tienen una legislación suficiente para luchar contra el cambio climático

Afrontar los retos de la descarbonización

El algodón está hecho de carbono biogénico extraído de la atmósfera durante el crecimiento de la fibra, afirma Jesse Daystar, director de sostenibilidad de Cotton Incorporated. El beneficio de esta captura no suele tenerse en los actuales estudios de sostenibilidad actuales. Esto da lugar a una sobreestimación del impacto de las prendas de algodón en el calentamiento global.

Así, cuando tenemos un armario lleno de productos de algodón, actúa de forma similar a la de los árboles y las plantas de algodón. Captura y almacena carbono, sigue diciendo Daystar. A medida que crezca la población mundial, habrá más algodón en nuestros armarios, que seguirá reteniendo CO2 que de otro modo estaría en la atmósfera.

EarthDay.org pide al gobierno de Estados Unidos que promulgue una legislación que no sólo responsabilice a la moda de reducir sus emisiones de carbono. También le debe exigir que elimine de forma sostenible sus materiales de desecho y la ropa usada, ponga fin al uso de los materiales sintéticos vírgenes e imponga un impuesto sobre el carbono a las prendas fabricadas con materiales sintéticos vírgenes.

Es probable que los consumidores acojan con satisfacción estos cambios. Ya en 2021 el 58% afirmaba que la sostenibilidad y el medio ambiente influyían en sus compras de ropa. Esta cifra se elevaba al 65% en la generación del milenio y al 62% entre la generación Z.

Según el Foro Económico Mundial, la producción confeccionista se ha duplicado desde el año 2000. Los consumidores compraron un 60% más de prendas en 2014 que en 2000, pero las conservaron solo la mitad de tiempo. Esto está pasando factura a los vertederos, ya que el 85% de todos los textiles acaba cada año en uno de ellos.

El algodón, como los árboles, reduce la presencia de carbono

Pensemos que el 69% de todas las prendas está hecho con fibras sintéticas o artificiales. Según la Fundación Ellen MacArthur, menos del 1% de la ropa usada se recicla para hacer nueva. La mayoría dela ropa fabricada con materiales sintéticos acaba en los vertederos porque tiene poco valor. Según la EPA, la mitad de los gases procedentes de los vertederos son dióxido de carbono. A esto hay que añadir que los tejidos sintéticos pueden tardar decenas o incluso cientos de años, en biodegradarse.

El algodón, en cambio, se biodegrada con relativa rapidez tanto en el agua como en el suelo porque está hecho de celulosa, un compuesto orgánico que es la base de las paredes celulares de las plantas y de las fibras vegetales. La biodegradabilidad del algodón es un 99% mayor que la de los sintéticos en un entorno de compostaje.

Daystar afirma que los productores de algodón y las organizaciones algodoneras están trabajando para aumentar el carbono del suelo en un 30% y reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en un 39% y aumentar el carbono del suelo en un 30%.

Es un objetivo importante, pero, en última instancia, me encantaría que el algodón fuera neto negativo, afirma Daystar. Dentro del sector textil/moda, el algodón tiene una oportunidad única para reducir el cambio climático y capturar más carbono del que libera. Actualmente, desde la semilla hasta la paca de algodón, ya captura más emisiones de CO2 de las que libera. A medida que sigamos mejorando todo su ciclo de vida, especialmente durante su fabricación y acabado, esperamos alcanzar un valor neto negativo para todo su ciclo de vida.

+ Info: https://earth.org/

Pinker Moda

21.04.2023