El sexto índice sobre transparencia en la moda de Fashion Revolution reconoce algunos avances pero considera que son demasiado lentos

16.07.2021.- Fashion Revolution ha publicado por sexto año consecutivo su Índice Anual de Transparencia en el sector de la moda. Analiza 250 de las mayores marcas y cadenas detallistas del mundo a partir de los datos que ellas mismas han publicado en torno a su política laboral y medioambiental, sus prácticas y su impacto, tanto de ellas mismas como de sus cadenas de suministro.

Fashion Revolution, Índice de Transparencia
Conjunto veraniego de la italiana OVS, la empresa mejor posicionada
en el Índice de Transparencia de Fashion Revolution

El tema de las cadenas de suministro es clave. Muchas empresas consideran que no son competencia suya y que ellas no son quienes para mejorar sus criterios de actuación. Muchas organizaciones no gubernamentales, por el contrario, piensan que tienen una enorme responsabilidad sobre ellas, en todos los sentidos. Esto se ha visto también con motivo de las crisis generadas por el Covid-19.

La marca italiana OVS encabeza el ranking con una puntuación del 78%, 44 puntos más que en 2020 en una escala de 250. Sustituye a H&M, que pasa a segunda posición con 68%. Les siguen Timberland y The North Face, cada una con un 66%; y C&A y Vans, con 65%. Otras marcas que están por encima del 55% son Gildan, Esprit, United Colors of Benetton, Tommy Hilfiger, Calvin Klein, Van Heusen, Gucci, Target Australia, Kmart Australia y Patagonia. Ninguna de las 250 empresas supera el 80%.

Avances insuficientes

Fashion Revolution está parcialmente satisfecha porque reconoce una creciente transparencia entre las 250 marcas estudiadas. Al mismo tiempo, sin embargo, considera que el progreso es demasiado lento, sobre todo en temas clave como el aprovisionamiento, los sueldos, el exceso de producción, el uso del agua y la generación de emisiones.

El informe revela también los nombres de las 20 marcas que consiguieron solo un cero.Se trata de Belle, Big Bazaar, Billabong, Celio, Elie Tahari, Fashion Nova, Heilan Home, Jessica Simpson, Koovs, Max Mara, Metersbonwe, Mexx, New Yorker, Quiksilver, Pepe Jeans, Roxy, Semir, Tom Ford, Tory Burch y Youngor.

Algunas marcas han perdido posiciones en 2021 respecto a 2020. Wrangler, por ejemplo, ha perdido un 24%; Adidas y Reebok, un 15%; y Marks & Spencer, un 12%.

Otras han mejorado su posición. La primera ha sido la ya mencionada OVS, que ha ganado un 44%. Le siguen Ugg, con 37%; y Tom Tailor con 24%.

Fashion Revolution, Índice de Transparencia
Wrangler, una de las empresas que ha perdido más posiciones en el ïndice de Fashion Revolution

En general, las marcas y detallistas analizados informan todavía muy poco sobre su impacto medioambiental y los medios que ponen para reducirlo.

Fashion Revolution considera que la publicación de su Índice tiene ya un impacto importante en el sector de la moda. Un 47% de las empresas analizadas -un 13% más que en 2016, cuando apareció la primera edición del Índice- informan sobre los resultados de sus proveedores directos.

Información sobre las cadenas de suministro

Un 11% de los encuestados revelan información sobre sus proveedores de materias primas, un 4% más que en 2020. En 2016 no lo hizo ninguno. Un 27% proporciona también información sobre su estructura manufacturera, frente al 24% del año pasado.

La mayoría, sin embargo, sigue sin informar sobre sus esfuerzos para gestionar su exceso de producción, el uso de plásticos y la gestión de los desechos, a pesar de la urgencia de todos esos temas ante la crisis climática. Solo el 14% informa sobre su producción anual total, lo cual dificultad comprender la escala global de exceso de producción.

El 32% de las empresas consultadas declara tener un sistema para la recogida de prendas usadas, pero solo el 22% informa sobre lo que hacen después con esas prendas. Da toda la impresión de que en la mayoría de los casos las venden en ultramar en lugar de reciclarlas.

Del mismo modo, un 36% ha publicado sus avances en la reducción del uso de plástico virgen en los embalajes, pero solo un 18% hace lo mismo respecto a los textiles derivados del petróleo. En la mayoría de los casos, los consumidores finales no los reconocen como plástico.

Sara Ditty, autora del informe y responsable de política global en Fashion Revolution, ha afirmado: este año, nuestro Índice muestra señales de que existen algunos avances en la transparencia. Las grandes marcas, sin embargo, deberían hacer mucho más.

Las marcas y detallistas consultados todavía proporcionan poca información sobre lo que sucede en sus cadenas de suministro

Además, las mayores marcas y detallistas apenas informan sobre sus esfuerzos en temas importantes como el aprovisionamiento, la política salarial, la igualdad racial y de género, la sobreproducción, los desechos, el uso del agua y la emisión de gases efecto invernadero en proveedores.

Hace más falta información sobre los salarios pagados por sus proveedores

Fashion Revolution pide a marcas y detallistas que informen mejor sobre sus relaciones laborales. El 99% no informa sobre el porcentaje de sus trabajadores que recibe un sueldo estable y digno; y el 96% ni siquiera informa cómo se proponen pagar unos sueldos dignos a todos los trabajadores de su cadena de suministro.

El Índice añade que la pantemia del Covid-19 ha puesto de relieve injusticias que se están produciendo en las cadenas de suministro. Muchas empresas han cancelado pedidos dejando a miles de empresas y millones de trabajadores sin un futuro claro, mientras ellas se siguen beneficiando de la situación. Muy pocas empresas, por ejemplo, han informado sobre los trabajadores que han dejado sin trabajo; y solo el 18% han informado sobre sus cancelaciones de pedidos. Muchas retrasan también los pagos a sus proveedores: menos de un 10% se comprometen a pagarles en un máximo de 60 días. Todo ello hace muy difícil evaluar las consecuencias de la pandemia a lo anmcho del mundo.

Ditty ha añadido: los datos de este año nos recuerdan que la mayoría de las 250 empresas no informan sobre lo que hacen para pagar salarios dignos a sus trabajadores a lo largo de toda su cadena de suministro (…). Durante la pandemia, las empresas han seguido trabajando mientras que muchos de sus trabajadores han sufrido un impacto muy fuerte por la cancelación de pedidos, salarios no cobrados, inestabilidad laboral, etc.

Hace falta una legislación más completa

Aunque Fashion Revolution admite que las empresas han mejorado su transparencia, también añade que haría falta una mejor legislación para que marcas y detallistas fuesen realmente responsables de todo su impacto sobre las personas y el planeta. Si las empresas fallan, la legislación debería estipular sanciones y compensaciones claras.

El Índice de Transparencia de la Moda -concluye Ditty- ha fomentado el cambio porque ha normalizado la transparencia en las cadenas de suministro. Nuestro trabajo con otros socios y plataformas permitirá avanzar hasta que las marcas sean responsables y deban responder ante la ley.

+ Info: https://issuu.com/fashionrevolution/docs/fashiontransparencyindex_2021