La medida afecta a la fábrica de Sabadell y a dos filiales del grupo: Menarguens Industrial (Menisa), en Lleida, y Estamhil, también en Sabadell. Entre las tres suman una plantilla de 105 trabajadores, sobre la cual todavía no se ha presentado un expediente de regulación de empleo. La compañía, cuya intención en continuar con su actividad, no descarta platear una posible reducción de personal en el futuro plan de viabilidad. Gorina, especializada en la producción de tejido de lana de alta gama para sastrería y confección y últimamente también para las mesas de billar, arrastra deudas de casi seis millones de euros que asegura no poder hacer frente ante la caída de la demanda por la desaparición de las sastrerías y pañerías, la competencia asiática y el estancamiento del negocio de billar, así como el incremento de los costes energéticos y de personal.