“Sin una excelente aplicación de los fondos para la industria seguiremos perdiendo competitividad industrial frente a nuestros competidores”, afirmó el director general de Amec, Joan Tristany.

|15.04.2021| Amec, la comunidad de las empresas industriales internacionalizadas, celebró el pasado 12 de abril el acto Industria, Last Call. El encuentro virtual representó una advertencia sobre el momento decisivo en el que nos encontramos, una última oportunidad en la que la industria no debe perder su competitividad.

Para ello es necesario “aclarar el camino, identificar el destino hacia el que estamos dispuestos a correr y sumar voluntades y esfuerzos”. Así lo ha afirmado el presidente de amec, Pere Relats. Amec contó con la presencia del Secretario General de Industria y Pyme, Raül Blanco, ya que en opinión de Relats, “la colaboración público privada es fundamental”.

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Confluencia de elementos estructurales y coyunturales

El actual momento crítico se debe a que confluyen elementos estructurales, revolución tecnológica, emergencia climática y exigencias sociales hacia la sostenibilidad; y coyunturales, la pandemia y sus efectos sociales y económicos. “El momento coyuntural está ejerciendo de palanca para las exigencias estructurales”, ha explicado el director general de Amec, Joan Tristany.

En opinión de Tristany “los Fondos de Recuperación, que son la respuesta a la crisis generada por la pandemia, tienen un límite de tiempo y a ellos accederán también nuestros principales competidores”. Todos se beneficiarán de dichas ayudas con el foco puesto en la transformación en digitalización y sostenibilidad que les harán más competitivos. Así pues, “sin una excelente aplicación de los Fondos seguiremos perdiendo competitividad industrial, pero ahora de forma más acelerada”, sentenció Tristany.

Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia

Amec y su comunidad de empresas industriales internacionalizadas trasladaron al Secretario General de Industria algunas de sus preocupaciones. Blanco, que presentó el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, aseguró que “este momento es histórico. No vamos a tener otro plan de 70.000 millones. Si lo planteamos bien vamos a estar sembrando para las próximas décadas como no hubiéramos imaginado. Si lo hacemos mal, habremos perdido esta oportunidad”.

Ante la gran expectación que han generado los fondos, Blanco ha asegurado que se irán activando de forma paulatina hasta 2023; dirigiéndose a proyectos transformadores de los ámbitos estratégicos (digitalización, modernización y sostenibilidad, industria tractora e industria verde). “Las PYME estarán en los proyectos colaborativos, en sus cadenas de valor, y también en las convocatorias de financiación. Los fondos no están repartidos. Las empresas tendrán ocasión de presentar sus proyectos, contando con recursos de la nueva política industrial” que nazca del gran Pacto de Estado por la Industria y una nueva Ley de Industria que el Secretario General espera que se apruebe antes de final de año.

Colaboración público-privada

“Necesitamos administraciones implicadas”, afirmó el presidente de Amec, Pere Relats. “La voluntad de Amec no es la de presionar, sino la de compartir nuestro conocimiento, nuestra visión y todas las oportunidades que vemos”. Es por ello que remarcó la “necesidad de generar un ecosistema favorable para la industria, en el que estemos todos funcionando como un verdadero engranaje industrial. Administraciones, entidades públicas, privadas, medios de comunicación, centros de conocimiento y formación”.

El director general de Amec, Joan Tristany, recordó que en la crisis de 2008 hubo un consenso en que se debía cambiar nuestro modelo productivo. Sin embargo, a excepción del sector exterior, que sí se ha consolidado, el peso de la industria en el PIB se ha alejado del objetivo fijado por la UE y del de nuestros principales competidores; mientras que también se agranda la brecha en la intensidad innovadora.

Industria: 15% del PIB

Para Amec la industria debe representar el 25% del PIB con el fin de asegurar el progreso de la sociedad. “Defendemos un modelo económico de país con más industria, pero una nueva industria transformada que dé respuestas a las actuales demandas de la sociedad”, afirmó Tristany.

Algunos datos ilustrativos:

  • – Los salarios en la industria son casi un 20% superiores a la media de la economía
  • – El 95% de los trabajadores en la industria son asalariados
  • – El VAB/empleado en la industria es casi un 30% superior a la media de la economía.
  • – La industria genera servicios de mayor valor añadido. Según la OCDE los servicios de alto VA están ligados a la industria.
  • – El sector exterior está sustentado fundamentalmente en la industria.

Claves para el cambio de modelo productivo

El documento Claves para el cambio de modelo productivo, elaborado con la participación de más de 50 expertos de las empresas industriales de Amec, es una guía para este cambio de modelo en el que la industria debe volver a estar en el centro, pero para lo que será imprescindible una gran transformación. “Somos la comunidad de la industria positiva. Somos presente y, sobre todo, representamos el futuro. Participamos juntos en algo grande que reportará grandes beneficios a nuestra sociedad”, aseguró el presidente de Amec, Pere Relats.

Para más información: https://www.amec.es/