Jeans Redesign -desde 2019, el standard de la Fundación Ellen MacArthur para el denim- hace balance de sus dos años de existencia

26.07.2021.- Desde el lanzamiento del standard Jeans Redesign por parte de la Fundación Ellen MacArthur en 2019, sus normas han guiado la producción de más de medio millón de jeans, que pueden considerarse circulares. Esta meta, sin embargo, no ha estado exenta de debates y dificultades.

Conjunto denim de Frame, que sigue las normas de Jean Redesign

Las normas iniciales fueron acordadas por la propia Fundación con la colaboración de marcas, fabricantes, recicladores, expertos, etc. Están basadas en tres principios fundamentales:

  • – Eliminación de desechos y de polución.
  • – Uso de las materias primas y del producto final el mayor tiempo posible.
  • – Fomento de la regeneración de los sistemas naturales, incluido el agrícola.

En conjunto, el código intenta acercar las prendas a la economía circular con criterios sobre la salud humana, la durabilidad, el diseño y la reciclabilidad.

Eficacia, pero con dificultades

Ahora, dos años después de su promulgación, el programa se muestra eficaz para promover la circularidad en el sector del denim. Al mismo tiempo, las empresas del sector del denim siguen insistiendo en la dificultades para el cumplimiento de algunas de sus normas, como la reciente referente al contenido en materias primas post-consumo. La propia Fundación ha emitido ahora un informe sobre las dificultades y las soluciones que constituyen el pan de cada día del casi centenar de empresas asociadas a él.

Jeans Redesign aporta confianza a las organizaciones que quieren aprender a usar los principios de la economía circular en sus productos, asegura Laura Balmond, responsable del programa Make Fashion Circular, también de la EMF. Los retos y las soluciones identificadas significan que hace faltra más inversión e innovación en este sector.

Denim, Jeans Redesign
Uno de los artículos denim mostrados en el Museo del Denim

Las exigencias de Jeans Redesign son cada vez más ambiciosas. A primeros de este año han sido actualizadas, por ejemplo, con unos porcentajes mínimos de materias primas post-consumo, que de hecho son ya usados por bastantes de os fabricantes.

Una nueva exigencia es que las prendas deben contar con un mínimo de un 5% de contenido reciclado, avalado con el sello GRS (Global Recycled Standard) o el RCS (Recycled Claim Standard).

Algunos aspectos de Jeans Redesign

La mayoría de los participantes se ha comprometido a que su composición textil contenga un mínimo de un 98% de materiales de base celulósica (algodón, cáñamo, lyocell, modal y viscosa). Al mismo tiempo, sin embargo, aseguran que la obtención de materiales de este tipo suele resultar difícil.

Algunos están buscando vías nuevas para conseguirlo. BAM Bamboo Clothing está estudiando el uso de bambú entre esos materiales celulósicos. Arvind, Cross Textiles y Organic Basics están ensayando la colaboración con explotaciones agrarias regenerativas.

Otros fabricantes se quejan de que resulta difícil ofrecer prendas cómodas -muy demandadas durante la pandemia- si no pueden superar un 2% de otras fibras, especialmente las elásticas.

La circularidad de las fornituras es otro problema ya conocido. Los fabricantes se esfuerzan por utilizar cremalleras y botones que sean fácil de eliminar para poder reciclar las prendas, pero esto supone un coste adicional. Otros luchan para encontrar alternativas al galvanizado. Otras marcas como American Eagle, Bestseller, Tommy Hilfiger y otras están buscando la forma de reducir las fornituras a un mínimo.

Durante la pandemia, algunos fabricantes y marcas han propuesto rebajar el nivel de sostenibilidad para reducir costes, pero el programa ha mantenido sus criterios. A pesar de todas las dificultades, el 80% de los participantes en el programa siguen fabricando jeans de acuerdo con las normas del programa.

La pandemia ha subrayado los inconvenientes de nuestro actual sistema lineal de la moda, ha dicho también Balmond. Cuando buscamos maneras de recuperar el sector después del Covid-19, vemos que la economía circular representa oportunidades para defendernos del cambio climático, la pérdida de la biodiversidad, etc.

¿Triunfarán en el mercado los Jeans Redesign?

Todavía es pronto para saber si los jeans fabricados de acuerdo con nuestros principios -sigue diciendo Bamond- resistirán el desgaste del uso cotidiana. Existe verdadero interés por disponer de esos datos, que son difíciles de obtener porque estos productos ya usados raramente son devueltos a la marca o a la tienda. Esto sugiere que hay un oportunidad de negocio para controlar la vida y la devolución de estos productos y obtener datos que sirvan para mejorar su diseño y manufactura.

En todo caso, y a pesar de las dificultades, el sector ha demostrado que resulta posible fabricar jeans aptos para la economía circular. El 90% de los participantes lo han hecho usando algodón orgánico, aunque hace dos años resultaba todavía difícil y caro hacerse con él. Algunos, además, estrán sustituendo las fornituras metálicas con otras tejidas.

La mayoría de los fabricantes, por ejemplo, ha conseguido mejorar la seguridad de los químicos y de los procesos. Aunque la propia EMF todavía considera que hace falta más trabajo en este terreno, reconoce que el 94% de los participantes han alcanzado unos mínimos aceptables en la eliminación de las sustancias tóxicas y han dejado de usar permanganato potásico, acabados a la piedra y chorro de arena en los acabados.

Denim, Jeans Re3design
Etiquetas QR informativas de Calik Denim

Más del 75% de los participantes asegura que ya producen tejidos o jeans que cumplen la normativa del Jeans Redesign. La mayor parte del resto se muestra dispuesto a hacerlo.

Un tercio de las marcas han indicado que ya tienen jeans que están alineados con los estándares en un 95% o incluso un 100%. La mayoría de las más avanzadas son empresas de tamaño pequeño o mediano.

Contenido reciclado post-consumo

EMF informa que, aunque el uso de un contenido reciclado post-consumo -fijado ahora en un mínimo del 2%- supone un coste adicional, hay empresas que lo están consiguiendo. Mud Jeans llega al 40%, H&M al 35 y HNST al 21. Constituye un instruento fundamental para forzar la circularidad del sector.

Como la durabilidad es un criterio fundamental, la normativa de la EMF exige que los jeans puedan resistir un mínimo de 30 lavados domésticos. El 92% de los participantes afirma cumplir con esta exigencia. Algunos -como Fairblue Jeans, Kipa? Textiles, Cross Textiles y Outerknown- lo superan, llegando incluso a los 50 lavados.

Unspun, que presentó en enero su primera colección Redesign, además, usa en ella un hilo soluble, que facilita enormamente el reciclaje.

La trazabilidad no está todavía presente en las normas de Jeans Redesign, pero alguna marca -como Reformation, de Los Ángeles- ha combinado un código QR con FibreTrace, una tecnología de trazabilidad de la fibra. Escaneando el código en la prenda, el usuario accede a una página web con información sobre la composición de la prenda, su proceso productivo y su aprovisionamiento de materias primas.

Principales exigencias de Jeans Redesign

Según la normativa de este programa, los jeans deben:

  • – Estar diseñados y fabricados para durar física y emocionalmente.
  • – Resistir un mínimo de 30 lavados domésticos.
  • – Poder separarse el tejido de las fornituras (cremalleras, ojales metálicos y botones, por ejemplo) y accesorios si no se ha podido prescindir de ellos.
  • – Contener un mínimo de un 80% de fibras de base celulósica.
  • – Sus fibras adicionales no pueden impedir el reciclaje.
  • – Tener etiquetas con la identificación de sus componentes.
  • – Evitar todos los químicos y otros componentes que supongan un peligro para la salud del usuario y del medio ambiente.

Como puede verse, son exigencias costosas de cumplir, porque suponen costes adicionales o simplemente porque complican el lanzamiento de jeans. Al mismo tiempo, al cabo de los años las agradeceremos porque facilitan la circularidad del sector. Y quizá, en el mejor de los casos, será un precedente para que otros subsectores del textil/confección impongan también normas conducentes a la sostenibilidad ycircularidad. Un ejemplo más de la permanente batalla entre economía y bienestar.

+ Info: https://www.ellenmacarthurfoundation.org/assets/downloads/The-Jeans-Redesign-Guidelines-2021.pdf