La limitación del cromo VI, a debate
El cromo VI, que habitualmente se encuentra en artículos de piel, es un conocido causante de dermatitis. El sistema comunitario Rapex ya había informado sobre su incidencia y sobre la preocupación que causaba. Recientemente, el gobierno danés ha realizado un estudio más profundo sobre su uso y sus consecuencias.
Aunque en principio ya no se usa como componente para la curtición, puede encontrarse en algunos artículos de piel por transformación del cromo III, que se usa en el procesamiento de los curtidos. Cuando los restos de cromo tocan la piel se pueden producir afectaciones a su sistema inmunológico y provocar dermatitis.
El estudio realizado por el gobierno danés, con 53 pares de zapatos comprados en el mercado, correspondientes a distintos segmentos de mercado, calidades y precios, detectó que 50 de ellos contenían entre un 1 y un 3% de cromo en la parte superior de piel. Los analistas quedaron especialmente preocupados por su presencia en sandalias porque se suelen usar con el pie descalzo y el cuero toca directamente la piel.
Actualmente, en la UE no existe ninguna restricción específica para el uso de cromo VI en productos de consumo (sólo existe una, para su uso en cemento y en sus mezclas). Por esto, el gobierno danés ha propuesto incluir el cromo VI entre las sustancias restringidas por REACH, que debatirá este tema el próximo mes de enero.