La UE aprueba mantener los aranceles al calzado chino y vietnamita
Los Veintisiete decidieron así seguir las recomendaciones de la Comisión Europea, que a comienzos de mes propuso alargar los gravámenes que aplica a estos productos, tras argumentar que “sigue habiendo dumping con el calzado de piel de China y Vietnam en el mercado europeo”. Con la decisión de ayer, los Veintisiete optaron por desoír lo decidido en el comité antidumping, en el que quince estados miembros votaron a favor de retirar la penalización al calzado de cuero procedente de estos países.Los argumentos de los países productores de calzado (como España, Italia o Portugal, que desean un arancel fijo a las importaciones de China y Vietnam), pesaron más que los de aquellos en los que la distribución tiene más peso (Alemania y Reino Unido, principalmente).Los estados miembros llegaron a este acuerdo en una reunión de embajadores ante la UE, pero la aprobación formal de la prórroga se producirá en enero durante una reunión de ministros, como punto sin debate.La UE aplica desde 2006 un gravamen del 16,5% sobre los zapatos de cuero chinos y del 10 por ciento para los vietnamitas, incluidos los zapatos infantiles pero no los deportivos de alta tecnología. Según los cálculos de la Comisión Europea, esto tiene un impacto medio de 1,5 euros en pares con precios en torno a los 50 euros (que son importados a nueve euros de media).La CE recomendó alargar estos aranceles el 2 de diciembre pasado, tras argumentar que su retirada “traería consigo más dumping y más perjuicio, y podría detener el proceso de ajuste de una industria que emplea a más de 260.000 trabajadores en la UE”.El ejecutivo de la UE también consideró que los consumidores y distribuidores no se verán demasiado afectados por la continuidad de los aranceles.