Los planes de Dogi
Según explicó el consejero delegado de Dogi, Jordi Torras, prevén llevar a cabo este año ajustes de plantilla en sus plantas de España, Alemania y China, aunque no ha dado la cifra exacta de despidos a la espera de reunirse con el comité de empresa. Actualmente, Dogi cuenta con 318 trabajadores en España, 305 en China y 225 en Alemania.En su intervención en la junta, Torras indicó que Dogi prevé reducir este año un 79% sus pérdidas y un 8% las ventas como consecuencia del plan de viabilidad. En 2008, la empresa obtuvo unas pérdidas incurridas de 59,2 millones de euros, frente a los 22 millones de 2007, y alcanzó un nivel de ventas de 118 millones de euros, un 13% menos que el año anterior.El grupo textil prevé perder este año 12 millones de euros, lo que supondría una reducción del 79% respecto a 2008, y alcanzar un nivel de ventas de 108 millones, un 8% menos que el pasado año.Una vez que ya ha sido aprobado el concurso, Dogi va iniciar un “agresivo” plan de ajuste global que asegure la rentabilidad de la compañía a partir de 2010 mediante una estructura “estable” y “sólida”, según explicó su consejero delegado.Dogi también estudia vender, bien parte o bien todas, sus participaciones en algunas de sus filiales y se muestra abierta a que éstas se fusionen con otras compañías, lo que podría abrir su accionariado a nuevos miembros. En este sentido, Torras desveló que ya se han iniciado negociaciones respecto a Penn Elastic, la filial alemana, que se ha declarado insolvente.Por otra parte, el directivo ha achacado la mala salud económica de Dogi a la reducción del 50% de ventas en el último trimestre de 2008 y al primer trimestre de 2009, y a las dificultades de financiación, que han impedido a la empresa atender regularmente sus obligaciones financieras.La junta de hoy, que ha contado con una participación del 48% de los accionistas, ha transcurrido en un ambiente tenso ya que los accionistas han criticado severamente la gestión del actual equipo directivo de Dogi, al que han reclamado reiteradamente su cese.La empresa textil, fundada en 1954 por la familia Domènech, presentó a finales del año pasado unas pérdidas incurridas en el ejercicio de 59,2 millones, unas pérdidas acumuladas pendientes de compensar de 103,2 millones y una deuda total de 83,7 millones. Frente a estas cifras, el patrimonio neto de Dogi ascendía a 43,9 millones y el capital circulante a un negativo de 4,5 millones.La multinacional, fabricante de tejidos elásticos para los mercados de moda íntima, baño y deporte, posee plantas productivas en España, Alemania, China, Filipinas y Tailandia, así como oficinas comerciales en once países.