La nueva planta costará 130 millones de euros y pretende estar operativa este mismo año. Según explica el presidente de la compañía para Europa y América, Greg Vas Nunes, «con la implantación en Turquía, podremos dar una respuesta óptima a los clientes, de innovación a precio competitivo, con un mejor servicio al tejedor europeo».

Por otro lado, la compañía coreana amplía la capacidad productiva de la planta que tiene en la región china de Guangdong, con el objetivo de reforzar su posición y reducir distancias con el que continúa siendo su principal competidir y líder del mercado, Invista (con Lycra).