Este SCRAP será una gestora mancomunada de residuos textiles que deberá encargarse de la recogida y del tratamiento de esos residuos
16.01.2023.- Inditex, Mango, Ikea, Decathlon, H&M, Kiabi y Tendam han creado el SCRAP Asociación para la Gestión del Residuo Textil, una gestora mancomunada de residuos textiles en España, presidida ahora mismo por Mango. Aunque su creación jurídica se ha producido hace pocos días, el proyecto es resultado de diversos trabajos anteriores que se han realizado desde hace algunos años. Su nombre (scrap) es un término inglés que equivale en castellano a trozos, pedazos, retales, etc.
En el grupo de partícipes no figuran todavía nombres muy importantes del sector como Primark, El Corte Inglés, Carrefour, Lidl, Alcampo, etc. ¿Y qué pasa con plataformas digitales como Amazon, que mueven grandes cantidades de mercancías? No sería lógico que se libraran de las obligaciones de la nueva normativa.
Scrap, una respuesta del sector
Scrap, en todo caso, es una primera respuesta del sector de la moda a la legislación española, que es transposición de la comunitaria. Esa legislación exige que sean las propias empresas de moda las que se responsabilicen de recoger y tratar los excedentes que genera su actividad, como máximo a partir de abril de 2025.
En todo caso, la nueva normativa afecta a la recogida, separación y gestión (reutilización, reciclaje o desecho) de los productos cuando sus propietarios no quieran seguir usándolos. Cada una de esas tareas es un mundo. Pensemos en la tarea de recoger las prendas usadas, tanto en las tiendas como en contenedores especiales. ¿Y su reventa, reciclaje o desecho? Todas estas alternativas implican la existencia de instalaciones importantes, para las que hay que elegir la tecnología más acertada.
Parece evidente que Scrap deberá recurrir a la colaboración de instituciones que ya están trabajando en todos estos temas. De la misma forma, tendrá que acordar muchos aspectos operativos con las Administraciones Públicas. De hecho, las entidades locales deberán establecer ya la recogida separada de los residuos textiles antes del 31 de diciembre de 2024.
La legislación plantea la denominada responsabilidad ampliada de los productores, que les obliga a responsabilizarse de la organización de la gestión de los residuos. De hecho, algunas de las empresas asociadas a Scrap ya han asumido algunos de los aspectos de esa gestión. Falta, sin embargo, mucho por hacer.
Las empresas asociadas –asegura Scrap en un comunicado- quieren dar un impulso colectivo al reciclaje textil en España, avanzando hacia un modelo circular mediante la correcta gestión de los residuos del sector.
El precedente europeo
La Unión Europea ha creado ya la Estrategia sobre los Productos Textiles Sostenibles y Circulares. Obligará a que las empresas que vendan artículos textiles en Europa mejoren la trazabilidad y la composición de las prendas, con mayor presencia de fibras recicladas, para que sean más duraderas y reutilizables; o impulsar la producción a demanda. También les obliga a mejorar un etiquetado, a usar diseños que facilitan el reciclaje, y a utilizar el pasaporte digital de cada artículo.
Como es obvio, todo ello implica cambios sustanciales en la operativa de las empresas y unos costes sustanciales que –de una forma u otra- acabarán afectando a los consumidores finales. Según la Agencia Internacional de la Energía, la factura de la transición energética ascenderá a 120 billones de euros, el equivalente a 1,3 veces el PIB mundial. Pagarla costará 2,45 billones de euros anuales hasta 2025 y 3,6 entre 2025 y 2050.
Por este motivo, desde hace algunos meses se han alzado algunas voces que sugieren que el momento económico actual no es el más adecuado para complicar y encarecer la actividad de las empresas y el consumo de los ciudadanos.
En este caso, la ley (que deriva de la directiva europea sobre residuos) establece los costes que deberá cubrir el Scrap con las aportaciones de sus miembros. Entre estos podemos mencionar:
- Recogida, transporte y tratamiento
- Información a los consumidores
- Tratamiento de datos sobre todo ello
- Renovación de los sistemas de diseño de los artículos pensando en su reciclabilidad
- Información sobre durabilidad, posibilidad de reutilización, reparabilidad, reciclabilidad, etc. de los artículos.