Los organizadores de la Tokyo Fashion Week fueron más exigentes en la selección de creadores y potenciaron la llegada de compradores de otros países.
La Rakuten Fashion Week Tokyo (RFWT) se celebró del 11 al 13 de marzo, con un ánimo renovado después de la larga crisis del Covid. Esto fue gracias a la vuelta de bastantes creadores que exponían fundamentalmente en otras pasarelas. Los 43 diseñadores mostraron sus colecciones para otoño/invierno 2024/2025 en dos recintos: Shibuya Hikarie y Omotesando Hills.
Los expertos coincidieron en que fue la edición más fuerte vista en años. La Semana de la Moda de Tokyo luchó por recuperarse después de los cierres pandémicos, que la dejaron aislada de la moda mundial. Los organizadores, por ejemplo, no habían patrocinado la asistencia de prensa y la llegada de compradores internacionales desde 2019. En esta ocasión, tomaron medidas para corregir esta situación. Invitaron, por ejemplo, a algunos periodistas extranjeros por primera vez desde 2019. Además, se asociaron con Porsche Japón para proporcionar conductores a los invitados.
La marca japonesa Anrealage cerró la fashion week con la primera colección de su nueva marca masculina. Su diseñador, Kuhiniko Morinaga, había desfilado en París durante los diez últimos años. «Como normalmente desfilo en París -explicó-, algunas personas podrían pensar que la vuelta a Tokyo es un paso atrás. Yo no lo veo así. Hay muchas cosas maravillosas en Tokyo y quiero seguir mostrando moda masculina aquí».
«Esta temporada, nos hemos vuelto más estrictos en la selección de diseñadores. Nos hemos centrado en los más establecidos en la ciudad«, explica Kaoru Imajo, directora del comité organizador. «Antes, teníamos desfiles muy pequeños y desfiles de diseñadores muy jóvenes. Pensamos que eso no era bueno para nuestra fashion week. Este cambio ha permitido la presencia de algunos de los talentos más fuertes de Japón, sin la distracción que pueden significar los restantes».
Selección de diseñadores
Oros cambios en la RFWT también dieron mayor relevancia al evento. Algunos diseñadores, como Kamiya, encontraron lugares interesantes para desfilar fuera de los más habituales. Kota Gushiken inyectó energía con un formato de espectáculo inusual con comediantes.
Los expertos también señalaron que esta fashion week fue más consistente que las anteriores. Desfilaron, por ejemplo, muchos nombres conocidos de moda femenina que atrajeron a muchos asistentes. El desfile del diseñador japonés Tanaka alcanzó un gran éxito al comienzo de la semana, con 685 asistentes. El veterano Mikio Sakabe realizó su desfile en el Gimnasio Nacional Yoyogi ante unos 4.000 invitados.
«En general, mi reacción ante lo que he visto es bastante positiva en la RFWT», ha dicho Eugene Rabkin, fundador de la plataforma de moda Style Zeitgeist, que fue invitado al evento. Destaca Hidesign, una nueva marca de prendas laborales y la diseñadora de moda femenina Akiko Aoki. También afirma, sin embargo, que vio otras colecciones que parecían poco elaboradas. «Esto se debe a que los creadores han tenido una buena idea, pero una mala ejecución. A veces los tejidos no están a la altura de lo que deberían ser, lo cual es extraño considerando los recursos textiles en Japón. Todos conocemos a diseñadores europeos bien conocidos que van a Japón a buscar tejidos para sus colecciones».
Mantener el nivel
Uno de los mayores desafíos de Tokyo será mantener el nivel y la coherencia que ahora ha demostrado, básicamente por motivos económicos. Un desfile modesto puede costar allí un mínimo de 18.500 euros. Los diseñadores más importantes gastan aquí casi 95.000€.
Los diseñadores están preocupados por este coste. Preguntados por su futura vuelta a la pasarela, muchos expresaron dudas. «Quiero seguir desfilando, pero es difícil garantizar si podré hacerlo cada vez«, respondió el diseñador Yohei Ohno, que dirige una marca de moda femenina. Esta temporada, mostró su colección en el museo Sen-Oku Hakukokan, un lugar proporcionado por Sumitomo, dentro de su relación con Ohno, que diseñó los uniformes para la Expo de Osaka.
Los premios también pueden ayudar. El Tokyo Fashion Award ofrece cada año un desfile a seis diseñadores de moda masculina y a otros seis de moda femenina. También les proporciona un showroom en París durante dos temporadas, pero es frecuente que algunos abandonen su presencia en París una vez que cesa el apoyo.
Kohei Hashimoto, un comprador de moda femenina en Isetan, es optimista respecto al futuro. «Parece que todo se ha vuelto mejor esta temporada. Paso a paso, se está haciendo mayor y mejor. Creo que el futuro de Tokyo parece brillante».
Kaoru Imajo admite que el futuro de la RFWT es un desafío. Espera que ayude el reforzamiento de la presencia de asistentes internacionales. Asegura que invitar a compradores con poder adquisitivo es una parte clave de la estrategia de la Semana de la Moda de Tokyo. «Queremos más compradores internacionales para poder apoyar el lado comercial de las marcas«.
Para más información: https://rakutenfashionweektokyo.com/en/
28.03.2024
