La polémica surge del hecho de que Veltroni había prometido al diseñador que su museo se ubicaría en las dependencias del antiguo Mercado del Pescado romano, un espacio de unos 5.000 m2. Pero el nuevo equipo de gobierno, dirigido por Gianni Alemanno, quiere destinar estos edificios a un museo y un centro universitario dedicados a la moda y el museo reuniría la obra de varios diseñadores. Así lo anunció el pasado sábado el presidente de la Comisión de Turismo y Moda, Alessandro Vannini Scatoli. Dentro de este complejo, Valentino podría tener un espacio dedicado a él, pero no sería ya exclusivamente suyo. “Por ahora no hemos recibido ninguna comunicación oficial”, explicaba ayer la portavoz del diseñador, Daniela Giardina, que recordaba que Veltroni había anunciado que el antiguo Mercado del Pescado se había elegido como sede del Museo de Valentino de manera pública y delante de toda la prensa internacional. Valentino, que se retiró de las pasarelas hace ahora un año, creó su empresa en Roma en 1960, desde donde se consolidó como uno de los principales modistos del siglo pasado. En 1990, abrió en la capital italiana la Academia Valentino, un espacio cultural destinado a recaudar fondos a la lucha contra el sida.