Se acerca el 7 de octubre, fecha en la que expiran los aranceles temporales que el Ejecutivo comunitario aplicó el pasado mes de abril, y los Veinticinco siguen sin alcanzar un acuerdo para darles continuidad o no. Si antes de este día no se ha dado el visto bueno a la propuesta de la Comisión de imponer aranceles fijos, las importaciones chinas y vietnamitas de calzado quedarán libres de cualquier tipo de gravamen. A pesar de ir contra reloj, todavía queda tiempo para una nueva reunión. Según ha explicado el portavoz de Comercio de la Comisión Europea, Peter Power, el asuntó pasará ahora a nivel ministerial. Los titulares de Justicia e Interior de los estados miembros deberán discutir la cuestión en un encuentro que se ha fijado ya para el próximo 5 de octubre. De todos modos, se espera que antes de esta cita, se haya podido llegar a algún tipo de acuerdo para que los ministros de Justicia e Interior lo aprueben sin debate. Sin embargo, Power ha reconocido que será difícil un acuerdo para la fecha.Las negociaciones siguen a puerta cerrada y la Comisión se niega a avanzar propuestas antes de una resolución conjunta. De todos modos, entre las cuestiones en las que empieza a ser más flexible está la de reducir la duración de los aranceles fijos a menos de cinco años, que es el tiempo que proponía en un principio.El gobierno europeo propone establecer aranceles del 16,5% y del 10% para el calzado procedente de China y Vietnam, respectivamente, a excepción del deportivo técnico. Esta propuesta ya ha sido sometida a votación tres veces entre los países miembros sin alcanzar ningún tipo de consenso en ninguna de ellas.