El sector textil/moda debe luchar contra los materiales de origen petroquímico, proponiendo fibras textiles que sean naturales y renovables

27.11.2020.- Cada vez preocupa más la abundancia de fibras textiles de origen petroquímico y de fibras cuya producción exige un gran consumo de agua. Afortunadamente, van apareciendo nuevas fibras de origen natural y renovable que constituyen una alternativa interesante. Aquí vamos a hablar de varias de ellas.

Ananas-Anam: fibra de hojas de piña

Fibras textiles
Fibra procedente de las hojas de piña

La empresa Ananas-Anam fabrica en Filipinas fibras textiles con hojas de piña, que son un subproducto de la cosecha de estas frutas. Las hojas se recogen después de la cosecha. De ellas se extraen unas fibras largas, que después se lavan y se secan. Las fibras resultantes -que son muy suaves- se pueden mezclar con un ácido poliláctico procedente del maíz. Después se procesan para conseguir un no-tejido, que es enviado a España, donde se fabrica Piñatex.

Los tejidos de Piñatex son transpirables y se pueden lavar con agua y jabón. Contienen, sin embargo, un 10% de un revestimiento de poliuretano que no es biodegradable. Bastan 480 hojas para fabricar un metro cuadrado de Piñatex. Es una materia prima que ya están usando en algunos artículos marcas como Hugo Boss y H&M. También se utilizan en tapicerías y en el sector de la automoción.

Más información en https://www.ananas-anam.com/

Orange Fiber: desechos de naranja

La firma italiana Orange Fiber utiliza desechos de la producción de zumo de naranja para producir celulosa que se puede hilar. Maria Elena Nicotra, especialista en comunicación digital de esta empresa, asegura que hemos desarrollado y patentado una tecnología para extraer celulosa de los subproductos de la naranja. Es muy interesante para nuestro país, porque Italia produce cada año más de 700.000 toneladas de ese zumo. Es un subproducto que -si no lo usásemos nosotros- debería ser eliminado a cargo de los fabricantes de zumos. En Catania (Sicilia) procesamos la pasta que queda después de extraer el zumo. Después lo enviamos a España donde un hilador se encarga de fabricar el hilo. Después vuelve a Italia, a Como, donde fabricamos el tejido.

La propia Maria Elena sigue explicando los aspectos técnicos de esta fibra: nuestro hilado celulósico tiene un toque sedero y puede mezclarse con otros materiales textiles para satisfacer las necesidades de los diseñadores. El resultado final son tejidos sederos y ligeros, que pueden ser brillantes u opacos, según las necesidades de cada cliente. Ya hemos desarrollados popelines, puros o mezclados con seda. En 2017, Ferragamo presentó una colección con un filamento de 110 dtex, mezclado con seda, para obtener un twill sedero que tiene el mismo tacto, aspecto y funcionalidad que un tejido de seda. Puede ser tintado y estampado con la misma tecnología que el sector usa para otros tejidos.

Los planes de Orange Fiber pasan por escalar esta tecnología, entre otras cosas para optimizar los costes. Creemos que la sostenibilidad -por ejemplo, a base de usar desechos y subproductos- es el futuro de nuestro planeta. Queremos expandir nuestra producción fuera de Europa para aumentar nuestro impacto y reducir la dependencia logística. En 2019 conseguimos 650.000 euros de financiación a través de una campaña de crowdfunding. Con ellos pudimos comprar nueva maquinaria que nos permitirá llegar a producir 70.000 metros de nuestra fibra a fines de 2020.

Más información en http://orangefiber.it/en/

Singtex: granos de café

La empresa coreana Singtex usa granos de café para producir un hilado textil denominado S.Cafe. Mezcla los granos con desechos plásticos hasta formar un pellet que, cuando se funde, se transforma en filamentos que se pueden hilar. Los tejidos resultantes controlan el olor, protegen contra los rayos UV y son de secado rápido. Entre las marcas que los usan están Timberland, Hugo Boss y The North Face. Durante la pandemia, se están usando también para fabricar equipos de protección individual. Singtex está desarrollando ahora, además, un producto sustitutivo de las tintas químicas con su tecnología P4Dry.

Más información en http://www.singtex.com/en-global/technology/fabrics_info/scafe

Infinited Fiber: desechos celulósicos

Infinited Fiber, empresa finlandesa ganadora del premio The Europas 2020 ‘Hottest Sustainability Tech,’ realizó hace poco una jornada informativa. En ella, Ann Sarimo, su responsable de marketing, explicó cómo su tecnología permite crear nuevas fibras a partir de desechos celulósicos procedentes del sector textil y papelero. El método incluye el tratamiento de esos materiales por calor y la adición de urea. Así consigue un líquido que puede hilarse en húmedo.

Ahora –aclaró Ann– ya sabemos utilizar restos ricos en celulosa, sobre todo de textiles post-consumo. Además, podemos usar restos de cartón y desechos agrícolas también ricos en celulosa, como la paja. En la jornada informativa hemos mostrado textiles y prendas realizados solo con nuestra fibra o con mezclas con algodón orgánico. También hemos producido muestras de no-tejidos que han dado buenos resultados en los tests a los que los hemos sometido.

Info: https://infinitedfiber.com/

Swicofil: plataforma informativa sobre nuevas fibras

La empresa suiza Swicofil, por último, ayuda a los fabricantes textiles a encontrar las fibras especializadas que necesitan entre las muchas posibilidades existentes. Además de las ya mencionadas, hay otras empresas que utilizan paja de arroz, corteza de caña de azúcar, residuos de cáñamo, etc.

Swicofil es una plataforma que tiene información sobre muchas fibras e hilados. Nosotros -ha explicado Adriana Ricklin, del equipo directivo de Swicofil- no los fabricamos pero podemos poner a los interesados en contacto con sus productores. Durante los últimos años, hemos creado una red con información sobre los fabricantes de muchos artículos diferentes y sobre sus aplicaciones. De esta forma, nuestros clientes nos contactan solo a nosotros en lugar de tener que dirigirse a muchas empresas diferentes para encontrar lo que buscan. Así pueden ahorrar mucho tiempo y esfuerzo.

La pandemia de coronavirus ha afectado directa o indirectamente a todo el sector textil, por ejemplo, por la menor producción de automóviles que consumen muchas fibras. A pesar de eso, hemos aprovechado este tiempo como una oportunidad. Durante el confinamiento, todos hemos tenido la oportunidad de pararnos, tomar un respiro y crear nuevas ideas innovadoras.

Más información en https://www.swicofil.com/