EDC publica un informe sobre relaciones comerciales en el denim
El informe de EDC destaca falta de ética por parte de marcas, detallistas e importadores en denim. ¿Existen también en el resto de la moda?
En 2020 el Transformers Foundation -nacida en el salón Kingpins– publicó ya un informe sobre el nivel ético existente en aquel momento en las relaciones entre fabricantes y las marcas a las que vendían su producción. Ahora, poco más de 3 años después, el Ethical Denim Council (EDC), nacido en 2022 y con sede en Nueva York, publica un nuevo estudio sobre el mismo tema, titulado State of the Denim Suply Chain. La redacción la ha hecho Sharmon Lebby, de Blessed Design Consulting.

El Ethical Denim Council es una organización sin ánimo de lucro con sede en Nueva York. Está basada en sus ocho principios éticos, tiene como objetivo dar mayor carga ética a las relaciones entre proveedores y clientes en el sector del denim. Después de leerlo con calma, llegamos a la conclusión de que su análisis y sus conclusiones son muy similares a lo que se produce en todo el sector de la moda, en general.
Aunque las marcas y las cadenas detallistas han avanzado en su transparencia y responsabilidad, queda todavía un largo camino hasta llegar a una situación aceptable, especialmente en lo que respecta a la política salarial y al bienestar de los trabajadores. El informe desvela que las prácticas poco éticas son todavía tan abundantes que constituyen el standard real del sector del denim. Como el mercado muchas veces les exige prácticas mejores, muchas de ellas se refugian en el greenwashing, sin solucionar los problemas existentes.
La clave del problema es que los compradores intentan comprar al menor precio posible, según apuntan desde EDC. En consecuencia, dejan en manos de sus proveedores la respuesta a las necesidades de sus trabajadores.
Mecánica del estudio
El trabajo de campo del Ethical Denim Council pidió las opiniones de 123 fabricantes -mayormente asiáticos- sobre sus relaciones con sus clientes occidentales. Representaban a 233.000 trabajadores, con una media de 3.430 por fábrica. Se les envió un cuestionario con preguntas abiertas y cerradas, que cubrían sus relaciones con sus clientes, su comunicación con ellos, sus sistemas salariales y otros temas éticos. Por supuesto, todas sus respuestas fueron tratadas con absoluta confidencialidad.

El análisis de las respuestas indica que la gran mayoría de marcas, detallistas e importadores tienen conductas que pueden calificarse de poco éticas. Se trata sobre todo de retrasos en los pagos, cancelaciones de los pedidos e imposición de descuentos, prácticamente igual que antes de la pandemia. Todo ello -sobre todo, los precios impuestos por sus clientes, hoy en día menores que antes de la pandemia- impide a los fabricantes mantener estrategias éticas y sostenibles. Al mismo tiempo, se quejan de que los precios finales de sus artículos han seguido subiendo, presionando a los consumidores.
También se quejan de que sus clientes no son conscientes de las consecuencias que todo esto tiene en sus empresas y en sus trabajadores. De la misma manera, la gran mayoría considera que debería haber una normativa de obligado cumplimiento. Sin ella, sus clientes difícilmente adoptarán actitudes más justas.
Por el momento, el Ethical Denim Council no ha publicado los nombres de los clientes con peor comportamiento, pero los ha comunicado a varias universidades, instituciones sin ánimo de lucro, asociaciones profesionales, etc.
Por supuesto, el informe también toma en consideración los argumentos con los que los clientes defienden su operativa. Se trata especialmente del exceso de inventario y del bajo nivel de ventas.
Conclusiones del informe
El informe subraya la necesidad de establecer una conexión entre los principios éticos que afectan a las prácticas comerciales y laborales y su implementación práctica. Las marcas juegan un papel sustancial en la adopción de la responsabilidad en las relaciones comerciales. Deberían reconocer que la situación actual deja a los fabricantes en una posición de indefensión. Asimismo, deberían mostrar su buena voluntad con acciones tangibles, y no solo declaraciones de compromiso.
De momento, las conclusiones no pueden llegar más lejos. Ni el Ethical Denim Council ni la Fundación Transformers tienen poder para ello, aunque gocen de un merecido prestigio.
Para más información: https://www.ethicaldenimcouncil.org/
27.03.2024