La cifra de negocio de la joyería neoyorquina alcanzó los 872,7 millones de dólares (606 millones de euros), un 30,5% más, impulsada por el crecimiento del 55% de las ventas en Asia Pacífico y del 32% en Europa, mientras en América subieron un 25% y un 21% en Japón.

En los seis primeros meses del ejercicio, Tiffany obtuvo un beneficio neto de 171,1 millones de dólares (119 millones de euros), un 29,5% más, mientras la facturación de la compañía sumó 1.633,7 millones de dólares (1.135 millones de euros), un 25,4% más.

El presidente y consejero delegado de Tiffany, Michael J. Kowalski, ha destacado los fuertes resultados de la compañía a pesar de la incertidumbre económica.