Los temas de especial preocupación en sostenibilidad para WRAP son el ecodiseño, los modelos circulares de negocio y la reducción de la producción.

Catherine Salvidge, directora técnica para textiles de WRAP (Worldwide Responsible Accredited Production), ha señalados los aspectos que los retailers y las marcas de moda deben tener en cuenta durante 2024 en lo que se refiere a la sostenibilidad. Hace poco, WRAP había anunciado ya esos objetivos en su programa Textiles 2030.

En 2023 se vio que las medidas adoptadas para mejorar la sostenibilidad en el sector de la moda no fueron suficientes para reducir su impacto ambiental. Las áreas decisivas para mejorar la sostenibilidad en 2024 son:

  • Aumento de la circularidad en el diseño.
  • Uso de modelos de negocio circulares.
  • Reducción de los volúmenes de producción.

En noviembre, WRAP publicó su informe anual. Refleja que las 130 marcas y retailers de moda firmantes del acuerdo voluntario de WRAP se habían comprometido a reducir sus emisiones de carbono en un 50% y su huella hídrica en un 30% a lo largo de ese año. Las reducciones conseguidas, sin embargo, fueron de solo un 12% para las emisiones y de un 2% para la huella hídrica entre 2019 y 2022.

Las partes implicadas mejoraron la sostenibilidad en sus procesos de diseño y fabricación, y aumentaron la cantidad de prendas recicladas. Sin embargo, en ese mismo período, la producción y el consumo aumentaron un 13%, que anularon sobradamente los pasos positivos mencionados.

Si el sector quiere alcanzar los objetivos críticos del Acuerdo de París, el sector necesita acelerar la acción sobre el diseño y los modelos de negocio circulares y, al mismo tiempo, abordar una caída de la producción.

Diseño para la circularidad

Hasta el 80% del impacto ambiental de un producto se puede determinar en la fase de diseño. La UE está liderando el camino con su estrategia para textiles sostenibles y circulares, presentada en marzo de 2022. Incluye requisitos de diseño ecológico en el marco del Reglamento de Diseño Ecológico para Productos Sostenibles (ESPR), que se armonizarán con las tarifas estipuladas por la directiva sobre responsabilidad extendida del productor. Además, el DPP (Digital Product Passport) deberá informar sobre los productos, sus materiales y componentes y su huella ambiental.

Mantener nuestras prendas durante el mayor tiempo posible es crucial para la sostenibilidad. Un estudio de WRAP desmiente la idea de que los artículos más caros son los más duraderos y de que la sostenibilidad no es asequible para todos.

WRAP ahora está colaborando con la Universidad de Leeds y más de 20 retailers británicos para establecer protocolos de prueba, orientación y evaluación comparativa. Sus primeras directrices se publicarán en 2024.

Aunque se están logrando avances en el ecodiseño, pocas marcas han adoptado compromisos concretos en este terreno. El conjunto de herramientas de diseño circular Textiles 2030 puede proporcionar un marco para que las empresas desarrollen sus estrategias de diseño circular y lo comuniquen a sus cadenas de suministro.

Reducir el aumento de los volúmenes de producción

Este es el elefante en la habitación. Los crecientes niveles de producción están eliminando las mejoras ambientales realizadas en el diseño y la producción. WRAP y otras organizaciones están presionando a las marcas para que por lo menos informen sobre sus volúmenes de producción.

Como medidas complementarias, la UE ha prohibido el envío de excedentes a vertederos o a otros países. En diciembre de 2023, el Parlamento Europeo acordó prohibir la destrucción de existencias no vendidas.

Marcas y detallistas deberían reducir y gestionar los volúmenes de productos excedentes, prever mejor sus necesidades, comprar en cercanía, usar modelos de producción bajo demanda y ayudar a los clientes a comprar solo los artículos que les queden bien, activar programas de reventa, etc. La Guía de modelos de negocio circulares para la moda incluida en Textiles 2030 puede ayudar en esta tarea.

Clasificar todos los residuos textiles

Los proyectos a seguir en 2024 incluyen la clasificación automática para textiles circulares y la creación de una red mundial de instalaciones de clasificación que integre las últimas tecnologías. En Gran Bretaña, Re:claim, una empresa mixta del Ejército de Salvación y empresas del sector confeccionista ha anunciado planes para un sistema de reciclaje de poliéster a escala comercial, que sería el primero en el mundo.

WRAP también quiere que más marcas y minoristas establezcan acuerdos con recicladores para atraer la inversión necesaria para escalar estas tecnologías. El ejemplo más reciente de esto es la asociación de Zara con el reciclador Circ, que separa las fibras sintéticas del contenido celulósico de los residuos textiles, recuperando la mayor parte de las materias primas.

Reducir la huella hídrica de la moda

Hasta ahora, el principal enfoque ambiental de la industria han sido los objetivos del Acuerdo de París. Sin embargo, el informe Textiles 2030 destaca que la huella hídrica de la moda está empeorando cada día. Esto se debe principalmente al uso del algodón y al aumento de los volúmenes de producción.

Aunque el 71% del algodón utilizado por los signatarios del acuerdo, ahora provienen de fuentes mejoradas, esta cifra no es suficiente para reducir significativamente el impacto hídrico de la moda.

Para mejorar esta situación y para otras mejoras de sostenibilidad, en 2024 habrá que mejorar la colaboración entre empresas. A través de iniciativas como Textiles 2030, WRAP pretende a todas las organizaciones de la cadena de valor textil/moda para hacer avanzarla hacia un futuro más sostenible.

Para más información: https://wrapcompliance.org/es/

Pinker Moda

25.01.2024