Seminario sobre el mercado ruso en Heimtextil 2018

16/01/2018

Heimtextil 2018 ofreció una jornada informativa sobre el mercado ruso para promocionar su próxima edición en Moscú, que espera contar con 250 expositores y 18.000 visitantes, y que presentará gamas nuevas de productos, como textiles infantiles, textiles para hostelería y un Design Lab.

16.01.2018.- Ya en la primera presentación, a cargo de Igor Salomakin, de la Russia-Europe Textile Alliance, quedó claro que la economía y el consumo rusos están recuperando el tono, gravemente dañado hace varios años por las sanciones económicas occidentales a raíz de la crisis de Ucrania. Estas sanciones, sin embargo, no han afectado directamente al sector textil, sino a otros sectores más sensibles. Como consecuencia de todo ello, durante los últimos años el salón había encogido, pero ahora la situación está cambiando notablemente. De hecho, el mercado vaticina que en 2019 Rusia será ya una de las 20 economías más potentes del mundo.

Después tomó la palabra Vladislav Zabrodin, de Capital Legal Services, la asesora más importante del país, que respondió a la pregunta: ¿Qué podemos esperar del año 2018?

Comenzó explicando que el mercado ruso –que tiene más de 160 millones de consumidores- es complejo y más bien difícil, con un índice elevado de corrupción, que sube y baja a tenor de las circunstancias. En cambio, apenas quedan restos del intervencionismo estatal en la marcha de la economía. Uno de sus retos más importantes es el propósito del gobierno por alentar la producción doméstica y reducir así la dependencia del exterior.

El sector textil tiene una producción que apenas llega a cubrir el 15% de las necesidades domésticas, razón por la cual depende de las importaciones. Constituye, por lo tanto, un buen mercado para las marcas extranjeras. Ahora, además, hay un boom de la construcción y de la renovación inmobiliaria gracias al aumento del turismo y a la consiguiente expansión del sector hotelero.

Aconsejó a las marcas extranjeras entrar solas en ese mercado porque resulta difícil acostumbrar a los profesionales locales a la forma de trabajar de las empresas occidentales, aunque al mismo tiempo necesitan siempre el asesoramiento de algún experto en las peculiaridades jurídicas del sistema. La legislación, por desgracia, es compleja, cambiante e interpretable según el funcionario de turno.

El consumo se ha animado estos dos últimos años, pero si antes un consumidor gastaba cinco ahora solo gasta tres.

+Info: www.heimtextil.messefrankfurt.com y www.cls.ru